“En nuestro país, todavía está muy arraigado el machismo, aunque no lo queramos más”

Dora González.

Por Haide Ambriz Padilla/ Torreón, Coahuila.

La Organización de las Naciones Unidas tiene como tema principal la igualdad de género, el empoderamiento de las mujeres y las niñas, para contribuir de manera significativa al desarrollo económico mundial, el progreso y cumplir con los objetivos y metas de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

Fue el 14 de marzo de 2011, cuando la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer, aprobó el informe en su 55 periodo de sesiones, concluyendo que debería darse acceso y participación a la mujer y las niñas en la educación, la capacitación, la ciencia y la tecnología, incluida la promoción de la igualdad de acceso a la mujer a un empleo o trabajo decente. Y fue hasta el 20 de diciembre de 2013, cuando la Asamblea General aprobó la resolución relativa a la ciencia, tecnología y la innovación para el desarrollo, donde reconoció que el acceso y la participación plena, en condiciones de igualdad en la ciencia, la tecnología y la innovación para las mujeres y niñas, era imprescindibles para lograr igualdad entre géneros, el empoderamiento de la mujer y la niña.

Así la Asamblea General declaró el 11 de febrero, Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia, en reconocimiento al papel clave que desempeñan las mujeres en la comunidad científica y la tecnología.

En el marco de este día tan emblemático, presentamos la entrevista con Dora Leticia González Parra, ella es ingeniera química por la Universidad de Guadalajara y es coordinadora de juventudes en la Sociedad Latinoamericana de Ciencia y Tecnología (SOLACYT), se encarga de promover la Ciencia en los jóvenes. También es asesora de múltiples proyectos científicos propuestos por jóvenes mexicanos.

“Si te gusta la ciencia, no eres rara, eres única, no eres como los demás. Tampoco estás dentro de la estadística de la media ponderada, estás por encima de los estándares, eres maravillosa, poderosa y lo puedes lograr”

Dora González.

¿Por qué en México no hay vocaciones científicas?

Sí hay, pero no son suficientemente apoyadas. Tenemos vocaciones científicas en este país, por eso existe el Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología (COECYT); el Centro de Innovación Aplicada en Tecnologías Competitivas (CIATEC); el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías ( CONAHCYT), entre otros, es decir sí existen, pero les falta apoyo. El año pasado uno de mis estudiantes ganó una certificación en un concurso de Sociedad Latinoamericana de Ciencia y Tecnología (SOLACYT) para ir a Brasil, estuvo pidiendo apoyo en la escuela, en el gobierno y nadie lo apoyo, la escuela tampoco le quiso mover exámenes de inglés, lo que pasó es que desmotivaron al pequeño con un gran proyecto científico. Por eso ocurre la fuga de cerebros, la gente se va a dónde sí la apoyan.

Eso explica por qué México es el número 58 de 60 en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en temas de Ciencia y Tecnología ¿Qué le está faltando al país para incentivar la Ciencia y la Tecnología?

Faltan muchas cosas, también está el tema de la corrupción y la envidia. Está muy marcado el tema de estigmas sociales, si es mujer, es diferente, es indígena o de otra raza, todo eso lejos de ayudar, perjudica en todos los sentidos. Está el tema político, pasa que, en los concursos, alguien tiene un gran proyecto, gana y en vez de que apoyen al ganador, terminan apoyando al que tiene nexos familiares o de amistad con algún político.

¿Las escuelas y universidades deben promover la metodología STEAM?

Sí y el método científico. La metodología STEAM es un enfoque pedagógico que integra las disciplinas de ciencias, tecnología, ingeniería, artes y matemáticas en el proceso de enseñanza y aprendizaje. El problema en México es que los maestros todavía no le entienden a la metodología STEAM, hay una falta de capacitación para el cuerpo docente, si ellos no entienden cómo funciona la metodología, cómo podrían enseñarles a sus estudiantes. El arte es parte de nuestra historia y de la ciencia, la metodología STEAM contempla el arte, es multidisciplinario y es transversal, es decir en un proyecto científico escolar, podemos combinar: arte, matemáticas, tecnología, ciencia, educación física, sin problema.

Hablando de vocaciones ¿por qué crees que hay pocas vocaciones de mujeres en la ciencia?

En nuestro país, todavía está muy arraigado el machismo, aunque no lo queramos más. Me consta que los hombres tratan de no verse tan machistas en sus decisiones, es una lucha constante, es un estigma que tenemos en México. Pero también, está la otra parte, muchas mujeres no quieren dar batalla, incluso ni quieren pelear los espacios, existen muchos estigmas en pleno 2024. He escuchado expresiones tan prejuiciosas como “seguro son lesbianas, porque les gusta los robots” o “las mujeres no se ven bien haciendo cosas de hombres”. Hoy en día las mujeres se hacen de lado al escuchar este tipo de comentarios de quién se supone las debe apoyar y alentar, hablo de sus escuelas. También los padres de familia son culpables de esto, no quieren que sus hijas se involucren con ciencia y tecnología, quieren barbies y no mujeres mecánicas, ingenieras, o médicas en su familia, así lo han expresado algunas veces. Pasa que los padres de familia no están preparados para responder a los cuestionamientos científicos que les realizan las niñas, les dicen no estés pensando en eso, ponte a jugar con tus muñecas, porque saben que se van a casar y las van a mantener. Esos pensamientos, mejor dicho, anécdotas, hoy en día son muy lamentables, tenemos que luchar para eliminar esas brechas, esos estigmas y tabús que hay respecto a las mujeres y a la ciencia.

¿El sector educativo debería redoblar esfuerzos para incentivar vocaciones científicas en las niñas, adolescentes y jóvenes?

Efectivamente, necesitan redoblar esfuerzos, los hombres llevan una gran ventaja, incluso por temas ideológicos y religiosos, en la Biblia en Proverbios se menciona que se debe instruir al niño en su camino y aún cuando fuera viejo no se apartará de él. Es decir, sí desde niños detectamos la vocación que tienen, los impulsamos y desarrollamos sus talentos, tendremos niñas y niños con el gusto por la ciencia. Debemos escuchar a las infancias, qué quieren, qué les gusta y no encasillarlos con los juguetes clichés como electrodomésticos para niñas y armas para los niños, pensemos en formar mejores humanos para un futuro mejor. A los padres les diría que callen sus voces internas, esas que les dicen: cómo no fui bailarina de ballet, mi hija deberá serlo, obligándolos a vivir pasiones ajenas a sus hijos.

¿Qué falta para integrar el pensamiento científico a todas las escuelas del país?

Existe resistencia para integrar el pensamiento científico en las escuelas, lo vemos en los colegios que son religiosos, eliminan materias científicas que según ellos trasgreden su religión y enseñan de manera sesgada las cosas. También falta fuerza de voluntad y conciencia, debemos de tener la disposición de desaprender lo que sabemos para aprender cosas nuevas y la voluntad de continuar con eso. Además, muy pocas personas tienen disciplina y se requiere disciplina, para aprender o emprender una cosa nueva.

¿Qué les dirías a las niñas que tienen ese deseo de estudiar una ingeniería, ciencia, matemáticas, pero se encontraron con varios paradigmas sociales?

No eres rara, tampoco eres una cosa extraña, eres única, no eres como los demás. Tampoco estás dentro de la estadística de la media ponderada, estás por encima de los estándares, eres maravillosa, poderosa y lo puedes lograr, (ojalá me hubieran dicho esto a mí de pequeña). Que te den ganas de soldar cables, de programar computadoras, estar en un laboratorio, está muy bien, es normal, no son actividades exclusivas de niños, las niñas pueden hacer lo que quieran. Así como los niños también pueden meterse a la cocina, hay chefs muy buenos en el mundo, la cocina no es exclusiva para mujeres, no deberían existir los roles de género en las actividades que realizamos como humanos, todos podemos hacer cualquier cosa, siempre y cuando lo hagas con pasión.

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